Desde su oficina en Londres,Hanna Chalmers, Directora Internacional de investigación de Initiative, explica: En el 2010 vimos una juventud que había estado obligada a reajustar sus propias expectativas sobre la vida adulta. El año pasado, decidimos revisitar a los que tenían entre 25 y 34 años para saber si sus actitudes y aspiraciones habían cambiado. La especialista dice que lo interesante de repetir y ampliar el estudio fue constatar que la preocupación por la estabilidad y el acceso al dinero se había mantenido, sin importar los cambios que pueda haber experimentado la economía global.
Lo que vimos, entre otras cosas, es que mientras sus circunstancias financieras los convirtieron en una generación de creativos guerreros, la globalización los ha hecho sentir más inseguros que las anteriores generaciones-afirma.
Patricio Salas, encargado de estudios del consumidor de la agencia en Chile, complementa: Las generaciones anteriores sentían que podían hacer planes a largo plazo, lo que incluía tener casa, tener auto. Podías, más o menos, predecir tu vida, pero ahora no. Todo es cambiante.
Los jóvenes han enfrentado un choque de expectativas que los hizo reprogramarse, pensar de otro modo, dice, y amarrarse menos a lo material. En el estudio hay datos que indican que en Chile existe un mayor grado de preocupación sobre estos asuntos que el registrado a nivel global. De manera general, el 55% de las personas en este grupo etario teme no tener suficiente dinero para retirarse, en Chile, la cifra sube al 63%. En los países encuestados, en promedio, el 52% asegura no contar con dinero suficiente para cubrir sus gastos diarios, en nuestro país, el 60% se reconoce en esa situación. Mientras en el mundo el 47% de estos jóvenes está preocupado por salir de sus deudas, en Chile lo está el 66%. De la misma manera, si a nivel internacional el 38% de estos jóvenes ha visto reducidos sus ingresos, en el caso nuestro país esa situación afecta al 53% por dispensables para “resetearse”, son usualmente percibidas como características femeninas. Pero también porque pareciera que ellas sienten que el mundo está cambiando, aunque quizás más lento de lo que quisieran, a su favor.
Si divides los resultados de este estudio desde el punto de vista de género, se observa que las mujeres de esta generación perciben que tienen más posibilidades para elegir qué quieren hacer con sus vidas. Este fenómeno se vio con particular fuerza en Chile. A nivel global, el 27% de los encuestados, hombres y mujeres, se mostró “completamente de acuerdo” con la idea de que “tenían más opciones en la vida que sus padres”. En Chile, esta respuesta alcanzó un 44%. Si desglosas esta cifra por género, a nivel global las mujeres están de acuerdo en un 29%, mientras que el Chile lo esta el 51% de ellas.
Como el estudio tiene su origen en el mundo publicitario, aborda de manera extensa la relación entre esta generación, la tecnología, las marcas y el consumo. Una de las principales conclusiones es que en los resetters la decisión de compra está demorándose más que antes y está siendo mediada por la información que se obtiene en internet y las redes sociales, antes que por la publicidad tradicional. El 70% de los chilenos resetters hace comentarios sobre marcas y productos en línea (68% a nivel global). Además, Chile está en el tercer lugar entre los cinco países con más propensión a hacer comentarios negativos.
Esta generación le está exigiendo a las marcas que les den lo mismo que la sociedad les está pidiendo a ellos: adaptabilidad y creatividad. Pero también honestidad y que hagan un aporte social que vaya más allá del consumo-concluye Patricio Salas. ya
Fuente: Sofía Beuchat, revista ya, El Mercurio